4. Éstos fueron los seis hijos que le nacieron a David en Hebrón, donde reinó siete años y seis meses. Después reinó treinta y tres años en Jerusalén,





“Não abandone sua alma à tentação, diz o Espírito Santo, já que a alegria do coração é a vida da alma e uma fonte inexaurível de santidade.” São Padre Pio de Pietrelcina