22. lo mismo hizo con los hijos de Esaú, que vivían en Seír: El Señor exterminó a los hurritas, y ellos los echaron y se establecieron en su lugar hasta el día de hoy.





“Tenhamos sempre horror ao pecado mortal e nunca deixemos de caminhar na estrada da santa eternidade.” São Padre Pio de Pietrelcina