Cantar, 4
8. Ven del Líbano, novia; ven del Líbano, entra. Mira desde la cima del Amaná, desde las crestas del Senir y del Hermón, desde las guaridas de leones, desde los riscos de leopardos.
8. Ven del Líbano, novia; ven del Líbano, entra. Mira desde la cima del Amaná, desde las crestas del Senir y del Hermón, desde las guaridas de leones, desde los riscos de leopardos.
“E’ na dor que o amor se torna mais forte.” São Padre Pio de Pietrelcina