Isaías, 65
19. me regocijaré por Jerusalén y me alegraré por mi pueblo, sin que se oiga allí jamás lloro ni quejido.
19. me regocijaré por Jerusalén y me alegraré por mi pueblo, sin que se oiga allí jamás lloro ni quejido.
Isaías 65 habla sobre la diferencia entre aquellos que buscan a Dios y los que se alejan de él. Dios promete bendiciones para aquellos que lo buscan sinceramente, mientras juzgan a quienes lo rechazan y se involucran en el pecado. La restauración de Israel también se aborda y la creación de un cielo nuevo y una tierra nueva. A continuación hay cinco versos relacionados con los temas abordados en Isaías 65:
Proverbios 8:17: "Amo a los que me aman; los que me buscan me encuentran". Este versículo muestra que Dios está dispuesto a relacionarse con aquellos que lo buscan y lo aman del corazón.
Jeremías 29:13: "Me buscarás y me encontrarás cuando me busques con todo tu corazón". Este versículo habla sobre la importancia de buscar a Dios con sinceridad y rendición total.
Mateo 6:33: "Busque, en primer lugar, el reino de Dios y su justicia, y todas estas cosas se te agregarán". Este versículo fomenta la priorización de Dios en nuestras vidas y promete que él satisfará todas nuestras necesidades.
Apocalipsis 21:1: "Entonces vi un cielo nuevo y una tierra nueva, porque el primer cielo y la primera tierra habían pasado; y el mar ya no existía". Este versículo habla sobre la promesa de una nueva creación, como también se menciona en Isaías 65.
2 Pedro 3:13: "Pero nosotros, según su promesa, esperamos nuevos cielos y tierra nueva, en la que habita la justicia". Este verso refuerza la esperanza cristiana en la restauración total y la justicia que prevalecerá en la nueva creación, según lo prometido por Dios.
“Sigamos o caminho que nos conduz a Deus.” São Padre Pio de Pietrelcina
