Katolička Biblija
 

II Crónicas, 27

5. Hizo guerra contra el rey de los ammonitas, a los que venció. Los ammonitas le dieron aquel año cien talentos de plata, 10.000 cargas de trigo y 10.000 de cebada. Los ammonitas le trajeron lo mismo el año segundo y el tercero.

Stihovi vezani uz II Crónicas, 27:

2 Crónicas 27 es un capítulo que habla sobre Joton, hijo de Uzías, que reinó en Judá e hizo lo que era directamente a los ojos del Señor. Fortificó ciudades, construyó torres y muros, y tuvo victorias en batalla. Los siguientes son cinco versículos relacionados con los temas abordados en 2 Crónicas 27:

Proverbios 21:31: "El caballo está preparado para el día de la batalla, pero la victoria proviene del Señor". Este versículo destaca la importancia de la preparación y el esfuerzo humano, pero también reconoce que la victoria final proviene del Señor.

Salmo 127:1: "Si el Señor no construye la casa, en vano trabajo a quienes la construyen; si el Señor no guarda la ciudad, en vano observa al centinela". Este versículo destaca la importancia de la dependencia de Dios del éxito y la protección.

Proverbios 2:7-8: "Se reserva la verdadera sabiduría para la recta; es un escudo para aquellos que caminan con integridad. Protege los caminos de los justos y mantiene el camino de sus fieles". Este versículo destaca la importancia de la sabiduría y la integridad en seguir los caminos de Dios.

Salmo 18:32-33: "Dios es lo que me da con fuerza y ​​hace que mi camino sea perfecto. Me hace los pies como los del color y me pone en mis alturas". Este versículo destaca la ayuda y el fortalecimiento que Dios le da a sus fieles.

Isaías 26:3: "Mantendrás en paz la que cuya mente es firme en ti; porque él confía en ti". Este versículo destaca la importancia de la confianza en Dios para la paz y la estabilidad mental.





“O Senhor sempre orienta e chama; mas não se quer segui-lo e responder-lhe, pois só se vê os próprios interesses. Às vezes, pelo fato de se ouvir sempre a Sua voz, ninguém mais se apercebe dela; mas o Senhor ilumina e chama. São os homens que se colocam na posição de não conseguir mais escutar.” São Padre Pio de Pietrelcina