pronađen 354 Rezultati za: nuestros

  • Por eso el Señor Dios nuestro ha cumplido la amenaza que había pronunciado contra nosotros, contra nuestros jueces que gobernaron a Israel, contra nuestros reyes y nuestros príncipes, contra las gentes de Israel y de Judá. (Baruc 2, 1)

  • Al Señor Dios nuestro le pertenece la justicia; a nosotros y a nuestros padres, la vergüenza, como es el caso presente. (Baruc 2, 6)

  • No apoyamos en los méritos de nuestros padres y de nuestros reyes la misericordia que te suplicamos, oh Señor Dios nuestro. (Baruc 2, 19)

  • Pero nosotros no hicimos caso de tu invitación de servir al rey de Babilonia; y tú entonces has cumplido tus amenazas pronunciadas por medio de tus siervos los profetas; esto es, que los huesos de nuestros reyes y de nuestros padres serían sacados de sus sepulcros. (Baruc 2, 24)

  • No te acuerdes de las injusticias de nuestros padres; acuérdate ahora de tu mano y de tu nombre. (Baruc 3, 5)

  • Para eso has llenado de tu temor nuestros corazones, para que invocásemos tu nombre. Queremos alabarte en nuestro destierro, porque hemos apartado de nuestro corazón toda la injusticia de nuestros padres, que pecaron ante ti. (Baruc 3, 7)

  • Y aquí estamos todavía en nuestro destierro, donde tú nos dispersaste para que fuésemos oprobio, maldición, condenación por todas las injusticias de nuestros padres, que se apartaron del Señor Dios nuestro. (Baruc 3, 8)

  • Hijo de hombre, di también a la casa de Israel: Así andáis diciendo vosotros: Nuestros delitos y nuestros pecados pesan sobre nosotros y por causa de ellos nos consumimos poco a poco. ¿Cómo podríamos vivir? (Ezequiel 33, 10)

  • Y me dijo: "Hijo de hombre, estos huesos son toda la casa de Israel. Ellos andan diciendo: ¡Se han secado nuestros huesos, se ha desvanecido nuestra esperanza, estamos perdidos para siempre! (Ezequiel 37, 11)

  • "Bendito seas, Señor, Dios de nuestros padres; que tu nombre sea glorificado por los siglos. (Daniel 3, 26)

  • Tú has ejecutado sentencias justas en todos los males que nos has mandado a nosotros y a la ciudad santa de nuestros padres, Jerusalén; pues tú nos has tratado así conforme a la verdad y la justicia, a causa de nuestros pecados. (Daniel 3, 28)

  • ¡Oh Señor! Somos el más pequeño de los pueblos y estamos humillados en toda la tierra por causa de nuestros pecados. (Daniel 3, 37)


“Uma só coisa é necessária: estar perto de Jesus”. São Padre Pio de Pietrelcina