pronađen 238 Rezultati za: filisteos derrotados

  • Saúl dijo: «Bajemos durante la noche en persecución de los filisteos y saqueémoslos hasta el amanecer; no dejaremos ni un solo hombre.» Le respondieron: «Haz lo que mejor te parezca.» Pero el sacerdote dijo: «Acerquémonos aquí a Dios.» (I Samuel 14, 36)

  • Consultó Saúl a Dios: «¿Bajaré en persecución de los filisteos? ¿Los entregarás en manos de Israel?» Pero no respondió en aquella ocasión. (I Samuel 14, 37)

  • Regresó Saúl de la persecución de los filisteos y los filisteos alcanzaron su país. (I Samuel 14, 46)

  • Cuando Saúl se constituyó rey sobre Israel guerreó por todas partes contre todos sus enemigos: contra Moab, los ammonitas, Edom, el rey de Sobá y los filisteos; doquiera se dirigía resultaba vencedor. (I Samuel 14, 47)

  • Hubo una guerra encarnizada contra los filisteos toda la vida de Saúl. En cuanto Saúl veía un hombre fuerte y valeroso, se lo incorporaba. (I Samuel 14, 52)

  • Reunieron los filisteos sus tropas para la guerra y se concentraron en Soko de Judá, acampando entre Soko y Azeca, en Efes Dammim. (I Samuel 17, 1)

  • Se reunieron Saúl y los hombres de Israel, acamparon en el valle del Terebinto y se ordenaron en batalla frente a los filisteos. (I Samuel 17, 2)

  • Ocupaban los filisteos una montaña por un lado y los israelitas ocupaban la montaña frontera, quedando el valle por medio. (I Samuel 17, 3)

  • Salió de las filas de los filisteos un hombre de las tropas de choque, llamado Goliat, de Gat, de seis codos y un palmo de estatura; (I Samuel 17, 4)

  • Están Saúl, ellos y todos los hombres de Israel en el valle del Terebinto, guerreando con los filisteos.» (I Samuel 17, 19)

  • Israel y los filisteos se pusieron en orden de batalla, fila contra fila. (I Samuel 17, 21)

  • Mientras hablaba con ellos el hombre de las tropas de choque, llamado Goliat, el filisteo de Gat, subía de las filas de los filisteos, diciendo las mismas palabras, y le oyó David. (I Samuel 17, 23)


“A maior caridade é aquela que arranca as pessoas vencidas pelo demônio, a fim de ganhá-las para Cristo. E isso eu faço assiduamente, noite e dia.” São Padre Pio de Pietrelcina