pronađen 27 Rezultati za: enteramente

  • Hizo el mal a los ojos de Yahveh, enteramente como había hecho Joaquín. (II Reyes 24, 19)

  • Hizo el Mar de metal fundido, de diez codos de borde a borde. Era enteramente redondo y de cinco codos de alto. Un cordón de treinta codos medía su contorno. (II Crónicas 4, 2)

  • Hizo lo recto a los ojos de Yahveh, enteramente como lo había hecho su padre Amasías. (II Crónicas 26, 4)

  • Hizo lo recto a los ojos de Yahveh, enteramente como lo hizo su padre Ozías, salvo que no penetró en el Templo de Yahveh. El pueblo, sin embargo, seguía corrompiéndose. (II Crónicas 27, 2)

  • Hizo lo recto a los ojos de Yahveh, enteramente como David su padre. (II Crónicas 29, 2)

  • Después tomó Ezequías la palabra y dijo: «Ahora estáis enteramente consagrados a Yahveh; acercaos y ofreced víctimas y sacrificios de alabanza en la Casa de Yahveh.» Y la asamblea trajo sacrificios en acción de gracias, y los de corazón generoso, también holocaustos. (II Crónicas 29, 31)

  • Pero nosotros hemos comprobado que los judíos, condenados al exterminio por aquel hombre tres veces criminal, no son malhechores, sino que se gobiernan por leyes enteramente justas; (Ester 16, 15)

  • Quita las escorias de la plata, y quedará enteramente pura; (Proverbios 25, 4)

  • Pero también hubo otro que decía profetizar en nombre de Yahveh - Urías hijo de Semaías de Quiryat Yearim - el cual profetizó contra esta ciudad y contra esta tierra enteramente lo mismo que Jeremías, (Jeremías 26, 20)

  • Hizo el mal a los ojos de Yahveh, enteramente como había hecho Yoyaquim. (Jeremías 52, 2)

  • Comienzo de lo que habla Yahveh por Oseas. Dijo Yahveh a Oseas: «Ve, tómate una mujer dada a la prostitución e hijos de prostitución, porque la tierra se está prostituyendo enteramente, apartándose de Yahveh.» (Oseas 1, 2)

  • porque ellos, espinos aún enmarañados, empapados de bebida, como paja seca serán enteramente consumidos. (Nahún 1, 10)


“Se precisamos ter paciência para suportar os defeitos dos outros, quanto mais ainda precisamos para tolerar nossos próprios defeitos!” São Padre Pio de Pietrelcina