pronađen 11 Rezultati za: alcoba

  • entró tras el hombre a la alcoba y los atravesó a los dos, al israelita y a la mujer, por el bajo vientre. Y se detuvo la plaga que azotaba a los israelitas. (Números 25, 8)

  • El séptimo día, antes que entrara en la alcoba, la gente de la ciudad dijo a Sansón: «¿Qué hay más dulce que la miel, y qué más fuerte que el león?» El les repondió: «Si no hubierais arado con mi novilla, no habríais acertado mi adivinanza.» (Jueces 14, 18)

  • Algún tiempo después, por los días de la siega del trigo, fue Sansón a visitar a su mujer llevando un cabrito y dijo: «Quiero llegarme a mi mujer, en la alcoba.» Pero el padre de ella no le dejó entrar. (Jueces 15, 1)

  • Tenía ella hombres apostados en la alcoba y le gritó: «Los filisteos contra ti, Sansón». El rompió las cuerdas de arco como se rompe el hilo de estopa en cuanto siente el fuego. Así no se descubrió el secreto de la fuerza. (Jueces 16, 9)

  • Dalila cogió unos cordeles nuevos, lo amarró con ellos y le gritó: «Los filisteos contra ti, Sansón.» Tenía ella hombres apostados en la alcoba, pero él rompió los cordeles de sus brazos como un hilo. (Jueces 16, 12)

  • Entonces Amnón dijo a Tamar: «Tráeme la comida a la alcoba para que coma de tu mano.» Tomo Tamar las frituras que había hecho, se las llevó a su hermano Amnón a la alcoba (II Samuel 13, 10)

  • Entró Betsabé donde el rey, en la alcoba; el rey era muy anciano, y Abisag la sunamita servía al rey . (I Reyes 1, 15)

  • Vamos a hacerle una pequeña alcoba de fábrica en la terraza y le pondremos en ella una cama, una mesa, una silla y una lámpara, y cuando venga por casa, que se retire allí.» (II Reyes 4, 10)

  • Ni aun en tu rincón faltes al rey, ni en tu misma alcoba faltes al rico, que un pájaro del cielo hace correr la voz, y un ser alado va a contar la cosa. (Eclesiastés 10, 20)

  • Apenas habíalos pasado, cuando encontré al amor de mi alma. Le aprehendí y no le soltaré hasta que le haya introducido en la casa de mi madre, en la alcoba de la que me concibió. (Cantar 3, 4)

  • congregad al pueblo, convocad la asamblea, reunid a los ancianos, congregad a los pequeños y a los niños de pecho! Deje el recién casado su alcoba y la recién casada su tálamo. (Joel 2, 16)


“Jesus vê, conhece e pesa todas as suas ações.” São Padre Pio de Pietrelcina