pronađen 354 Rezultati za: persecución de Saúl

  • David se llevó de allí los huesos de Saúl y los de su hijo Jonatán, y también recogió los huesos de los que habían sido colgados. (II Samuel 21, 13)

  • Todos fueron sepultados en el país de Benjamín, en la tumba de Quis, el padre de Saúl. Y una vez que hicieron todo lo que el rey había ordenado, Dios se mostró propicio con el país. (II Samuel 21, 14)

  • David dirigió al Señor las palabras de este canto, cuando el Señor lo libró de todos sus enemigos y de la mano de Saúl. (II Samuel 22, 1)

  • Gad se presentó a David y le llevó la noticia, diciendo: "¿Qué prefieres: soportar tres años de hambre en tu país, o huir tres meses ante la persecución de tu enemigo, o que haya tres días de peste en tu territorio? Piensa y mira bien ahora lo que debo responder al que me envió". (II Samuel 24, 13)

  • Al ver esto, Ocozías, rey de Judá, huyó por el camino de Bet Hagán. Jehú se lanzó en persecución de él, y ordenó: "¡Hiéranlo también a él!". Lo hirieron sobre su carro, en la cuesta de Gur, que está cerca de Ibleám, y él huyó a Meguido, donde murió. (II Reyes 9, 27)

  • Cuando murió Samlá, lo sucedió Saúl, de Rejobot del Río. (I Crónicas 1, 48)

  • Cuando murió Saúl, lo sucedió Baal Janán, hijo de Acbor. (I Crónicas 1, 49)

  • Los descendientes de Simeón fueron Nemuel, Iamín, Iarib, Zéraj y Saúl. (I Crónicas 4, 24)

  • El hijo de Saúl fue Salúm; el hijo de Salúm, Mibsám; el hijo de Mibsám, Mismá; (I Crónicas 4, 25)

  • En tiempos de Saúl combatieron contra los agareos, y estos cayeron en sus manos. Así ocuparon sus campamentos por toda la parte oriental de Galaad. (I Crónicas 5, 10)

  • el hijo de Asir, Tájat; el hijo de Tájat, Uriel; el hijo de Uriel, Ozías; el hijo de Ozías, Saúl. (I Crónicas 6, 9)

  • Ner fue padre de Quis; Quis fue padre de Saúl; Saúl fue padre de Jonatán, Malquisúa, Abinadab y Esbaal. (I Crónicas 8, 33)


“É difícil tornar-se santo. Difícil, mas não impossível. A estrada da perfeição é longa, tão longa quanto a vida de cada um. O consolo é o repouso no decorrer do caminho. Mas, apenas restauradas as forças, é necessário levantar-se rapidamente e retomar a viagem!” São Padre Pio de Pietrelcina