pronađen 354 Rezultati za: persecución de Saúl

  • Cuando murió Samlá, lo sucedió Saúl, de Rejobot del Río. (Génesis 36, 37)

  • Cuando murió Saúl, lo sucedió Baal Janán, hijo de Acbor. (Génesis 36, 38)

  • Los hijos de Simeón: Iemuel, Iamín, Ohad, Iaquín, Sójar y Saúl, el hijo de la cananea. (Génesis 46, 10)

  • Los hijos de Simeón fueron Iemuel, Iamín, Ohad, Iaquín, Sójar y Saúl, el hijo de la cananea. Estos son los clanes de Simeón. (Exodo 6, 15)

  • El Señor endureció el corazón del Faraón, el rey de Egipto, y este se lanzó en persecución de los israelitas, mientras ellos salían triunfalmente. (Exodo 14, 8)

  • de Zéraj, el clan de los zerajitas; de Saúl, el clan de los saulitas. (Números 26, 13)

  • lo que hizo con el ejército egipcio, con su caballería y sus carros de guerra, cuando se lanzaron en persecución de ustedes y él desencadenó contra ellos las aguas del Mar Rojo, y los hizo desaparecer hasta el día de hoy; (Deuteronomio 11, 4)

  • No hubo un solo hombre en Ai o en Betel que no saliera en persecución de Israel. Y cuando lo hicieron, dejaron abiertas las puertas de la ciudad. (Josué 8, 17)

  • y tenía un hijo llamado Saúl, que era joven y apuesto. No había entre los israelitas otro más apuesto que él; de los hombros para arriba, sobresalía por encima de todos los demás. (I Samuel 9, 2)

  • Una vez, se le extraviaron las asnas a Quis, el padre de Saúl. Quis dijo entonces a su hijo Saúl: "Lleva contigo a uno de los servidores y ve a buscar las asnas". (I Samuel 9, 3)

  • Cuando llegaron a la región de Suf, Saúl dijo al servidor que lo acompañaba: "Volvámonos, no sea que mi padre ya no piense más en las asnas y esté inquieto por nosotros". (I Samuel 9, 5)

  • Saúl dijo a su servidor: "Vamos, ¿pero qué podemos llevarle a ese hombre? Ya no queda pan en nuestras alforjas, y tampoco tenemos un regalo para ofrecérselo al hombre de Dios. ¿Qué tenemos?". (I Samuel 9, 7)


“Se tanta atenção é dada aos bens desta Terra, quanto mais se deve dar aos do Céu? Faça, portanto, uma boa leitura espiritual, a santa meditação, o exame de consciência, e fará progresso na perfeição cristã e no amor de Jesus.” São Padre Pio de Pietrelcina