pronađen 293 Rezultati za: Importancia de la Alianza

  • Pinjás, nuestro padre, por su ardiente celo, recibió la alianza de un sacerdocio eterno. (I Macabeos 2, 54)

  • Invoquemos ahora al Cielo para que tenga piedad de nosotros y se acuerde de la alianza que hizo con nuestros padres, derrotando hoy a este ejército delante de nosotros. (I Macabeos 4, 10)

  • Y esta es la copia del documento que grabaron en planchas de bronce y enviaron a Jerusalén como memorial de paz y de alianza: (I Macabeos 8, 22)

  • A tal efecto, Tolomeo mandó una embajada al rey Demetrio, con este mensaje: "Hagamos una alianza entre nosotros. Yo te daré a mi hija, la que ahora tiene Alejandro, y tú serás rey en el reino de tu padre. (I Macabeos 11, 9)

  • Que Dios los colme de bienes y se acuerde de su alianza con Abraham, Isaac y Jacob, sus fieles servidores. (II Macabeos 1, 2)

  • Suprimió los humanitarios privilegios que los reyes habían concedido a los judíos, por intermedio de Juan, padre de Eupólemo, el mismo Eupólemo que fue enviado como embajador para hacer una alianza de amistad con los romanos; derogó las instituciones legales e introdujo nuevas costumbres contrarias a la Ley: (II Macabeos 4, 11)

  • Nuestros hermanos, después de haber soportado un breve tormento, gozan ahora de la vida inagotable, en virtud de la Alianza de Dios. Pero tú, por el justo juicio de Dios, soportarás la pena merecida por tu soberbia. (II Macabeos 7, 36)

  • que abandona al amigo de su juventud y olvida la alianza de su Dios: (Proverbios 2, 17)

  • No te des importancia en la presencia del rey ni te pongas en el lugar de los grandes: (Proverbios 25, 6)

  • "¿Quién anuncia las obras de justicia? ¿Quién las espera? Porque la alianza está lejos": (Eclesiástico 16, 22)

  • estableció con ellos una alianza eterna y les hizo conocer sus decretos. (Eclesiástico 17, 12)

  • Todo esto es el libro de la Alianza del Dios Altísimo, la Ley que nos prescribió Moisés como herencia para las asambleas de Jacob. (Eclesiástico 24, 23)


“Reze, reze! Quem muito reza se salva e salva os outros. E qual oração pode ser mais bela e mais aceita a Nossa Senhora do que o Rosario?” São Padre Pio de Pietrelcina