pronađen 335 Rezultati za: Fiesta con el Arca
Los querubines desplegaban sus alas sobre el sitio destinado al Arca, y recubrían por encima al Arca y sus andas. (II Crónicas 5, 8)
En el Arca se encontraban únicamente las dos tablas de piedra que Moisés, en el Horeb, había puesto allí: las tablas de la Alianza que el Señor había hecho con los israelitas a su salida de Egipto. (II Crónicas 5, 10)
y allí he puesto el Arca donde se encuentra la Alianza que el Señor concluyó con los israelitas". (II Crónicas 6, 11)
Y ahora, ¡levántate, Señor Dios, entra en el lugar de tu Reposo, tú y tu Arca poderosa! ¡Que tus sacerdotes se revistan de la salvación y tus fieles gocen de felicidad! (II Crónicas 6, 41)
En aquella ocasión, Salomón, y con él todo Israel, celebró la Fiesta durante siete días. Se congregó una asamblea inmensa, venida desde la Entrada de Jamat hasta el Torrente de Egipto. (II Crónicas 7, 8)
Al octavo día, tuvo lugar una asamblea solemne, porque habían celebrado la dedicación del altar durante siete días y la Fiesta durante otros siete días. (II Crónicas 7, 9)
Salomón hizo subir a la hija del Faraón desde la Ciudad de David a la casa que había edificado para ella, porque él decía: "Mi mujer no puede habitar en la casa de David, el rey de Israel, ya que los lugares donde ha entrado el Arca del Señor son sagrados". (II Crónicas 8, 11)
Según el rito de cada día, ofrecía lo que había mandado Moisés para los sábados, los novilunios y las tres solemnidades anuales, a saber: la fiesta de los Ácimos, la fiesta de las Semanas y la fiesta de las Chozas. (II Crónicas 8, 13)
Y al ver al rey de pie sobre el estrado, junto a la entrada, a los jefes y las trompetas junto al rey, a todo el pueblo que estaba de fiesta y tocaba las trompetas, y a los cantores que dirigían las aclamaciones con sus instrumentos musicales, rasgó sus vestiduras y gritó: "¡Traición! ¡Traición!". (II Crónicas 23, 13)
Una gran multitud se reunió en Jerusalén para celebrar la fiesta de los Ácimos en el segundo mes: fue una asamblea muy numerosa. (II Crónicas 30, 13)
Los israelitas que se encontraban en Jerusalén celebraron con gran alegría la fiesta de los Ácimos durante siete días, mientras los levitas y los sacerdotes alababan diariamente al Señor con todas sus fuerzas. (II Crónicas 30, 21)
Luego toda la asamblea resolvió prolongar la fiesta siete días más, y así pasaron otros siete días de gran alegría. (II Crónicas 30, 23)