Sabiduría, 16
26. Para que los hijos que tú amas, Señor, aprendiesen que no es la variedad de frutos lo que sustenta al hombre, sino tu palabra, que conserva a los que creen en ti.
26. Para que los hijos que tú amas, Señor, aprendiesen que no es la variedad de frutos lo que sustenta al hombre, sino tu palabra, que conserva a los que creen en ti.
“O grau sublime da humildade é não só reconhecer a abnegação, mas amá-la.” São Padre Pio de Pietrelcina