8. Por tercera vez lo llamó el Señor: "¡Samuel!". Se levantó, fue adonde estaba Elí y le dijo: "Aquí estoy, pues me has llamado". Comprendió entonces Elí que era el Señor el que lo llamaba,





“Para que se preocupar com o caminho pelo qual Jesus quer que você chegue à pátria celeste – pelo deserto ou pelo campo – quando tanto por um como por outro se chegará da mesma forma à beatitude eterna?” São Padre Pio de Pietrelcina