Deuteronomio, 32
2. Descienda como la lluvia mi enseñanza, caiga como el rocío mi cantar, como llovizna sobre el césped, como chubasco sobre el verde.
2. Descienda como la lluvia mi enseñanza, caiga como el rocío mi cantar, como llovizna sobre el césped, como chubasco sobre el verde.
“Ouço interiormente uma voz que constantemente me diz: Santifique-se e santifique!” São Padre Pio de Pietrelcina