11. Toda la gente que estaba en la puerta de la ciudad y los ancianos respondieron: "Somos testigos. ¡Que el Señor haga a esta mujer semejante a Raquel y a Lía, las dos que edificaron la casa de Israel! ¡Que llegues a ser poderoso en Efratá y adquieras renombre en Belén!





“O amor tudo esquece, tudo perdoa, sem reservas.” São Padre Pio de Pietrelcina