51. Y deponiendo las armas, hicieron la paz. Los judíos se cubrieron de gloria delante del rey y de todos sus vasallos, y regresaron a Jerusalén con un abundante botín.





Uma filha espiritual perguntou a Padre Pio: “O Senhor cura tantas pessoas, por que não cura esta sua filha espiritual?” Padre Pio respondeu-lhe em voz baixa: “E não nos oferecemos a Deus?” São Padre Pio de Pietrelcina