Eclesiástico, 43
13. A una orden suya cae la nieve, y él lanza los rayos que ejecutan sus decretos;
13. A una orden suya cae la nieve, y él lanza los rayos que ejecutan sus decretos;
“Não se desencoraje, pois, se na alma existe o contínuo esforço de melhorar, no final o Senhor a premia fazendo nela florir, de repente, todas as virtudes como num jardim florido.” São Padre Pio de Pietrelcina