Eclesiástico, 12
10. Nunca te fíes de tu enemigo, porque la maldad lo corroe como la herrumbre al metal:
10. Nunca te fíes de tu enemigo, porque la maldad lo corroe como la herrumbre al metal:
“Viva feliz. Sirva ao Senhor alegremente e com o espírito despreocupado.” São Padre Pio de Pietrelcina