Trouvé 55 Résultats pour: viñas

  • golpeaos el pecho por los campos risueños, por las fértiles viñas, (Isaías 32, 12)

  • hasta que yo venga y os lleve conmigo a un país como el vuestro, país de grano y mosto, país de pan y de viñas. (Isaías 36, 17)

  • Y esto te servirá de señal: Se comerá este año el grano caído y al año siguiente lo que brote sin sembrar; pero al tercer año podréis sembrar y cosechar, plantar viñas y comer su fruto. (Isaías 37, 30)

  • Harán entonces casas y habitarán en ellas, plantarán viñas y comerán sus frutos. (Isaías 65, 21)

  • Ella devorará tu cosecha y tu pan, devorará a tus hijos y a tus hijas, devorará tus carneros y tus vacas, devorará tus viñas y tus higos, arrasará tus ciudades fuertes en las que tanta confianza pones. (Jeremías 5, 17)

  • De nuevo plantarás viñas en los montes de Samaría, plantarán los plantadores y cosecharán. (Jeremías 31, 5)

  • Porque esto dice el Señor todopoderoso, Dios de Israel: Aún se comprarán casas, campos y viñas en este país. (Jeremías 32, 15)

  • ni edifiquéis casas, ni sembréis campos, ni plantéis viñas, ni tengáis posesiones; sino que durante toda vuestra vida habitaréis en tiendas, a fin de que podáis vivir largos días en el territorio en el que sois extranjeros. (Jeremías 35, 7)

  • ni nuestros hijos, ni nuestras hijas. No edificamos casas para vivir en ellas, ni poseemos viñas, campos ni sembrados, (Jeremías 35, 9)

  • En cambio, a la parte de la población que no poseía nada, Nebuzardán, jefe de la escolta, la dejó en la tierra de Judá, dándoles al mismo tiempo viñas y campos. (Jeremías 39, 10)

  • Residirán allí con seguridad, construirán y plantarán viñas. Vivirán seguros, cuando yo haya ejecutado mis sentencias contra todas las gentes de los alrededores que los desprecian. Y sabrán que yo, el Señor, soy su Dios". (Ezequiel 28, 26)

  • Luego le restituiré sus viñas; haré del valle de Acor una puerta de esperanza, y ella me responderá como en los días de su juventud, como en el día en que salió de Egipto. (Oseas 2, 17)


“Deve-se caminhar em nuvens cada vez que se termina uma confissão!” São Padre Pio de Pietrelcina