Trouvé 21 Résultats pour: pensamiento

  • No te dejes llevar de este pensamiento egoísta: Ya está cercano el año séptimo, el año del perdón y, si poniendo mala cara a tu hermano necesitado, no le das nada, podría apelar al Señor contra ti, y te harías reo de pecado. (Deuteronomio 15, 9)

  • Lejos de nosotros el pensamiento de rebelarnos contra el Señor y de querer abandonarle hoy levantando un altar para ofrecer holocaustos, sacrificios y ofrendas, fuera del altar del Señor, nuestro Dios, levantado en su morada". (Josué 22, 29)

  • Samuel le respondió: "Yo soy el vidente. Sube delante de mí al alto; hoy comerás conmigo, y mañana por la mañana os despediré después de haberte explicado todo lo que tienes en tu pensamiento. (I Samuel 9, 19)

  • Él respondió: "¡Lejos de ti tal pensamiento! No morirás. Mira, mi padre no hace cosa alguna importante o insignificante sin manifestármela confidencialmente. ¿Por qué me iba a ocultar mi padre este asunto? No es posible". (I Samuel 20, 2)

  • Jonatán respondió: "¡Lejos de mí tal pensamiento! Si yo llego a saber que mi padre ha decidido matarte, ¿no te advertiría yo mismo?". (I Samuel 20, 9)

  • ¿Acaso es hoy cuando he comenzado a consultar a Dios por él? Lejos de mí todo otro pensamiento. Que el rey no haga cargo alguno a su siervo y a toda su familia, porque tu siervo no sabe de todo este asunto ni poco ni mucho". (I Samuel 22, 15)

  • Pero que el Señor aleje de mí el pensamiento de poner mi mano en el ungido del Señor. Anda; coge su lanza y el jarro de agua, y vámonos". (I Samuel 26, 11)

  • ¿Qué es el hombre para que de él así te ocupes, para que pongas en él tu pensamiento, (Job 7, 17)

  • Hizo una colecta soldado por soldado y reunió hasta dos mil dracmas de plata, que envió a Jerusalén para que ofrecieran un sacrificio por el pecado: acción elevada y noble, inspirada en el pensamiento de la resurrección. (II Macabeos 12, 43)

  • La hacienda del rico es su fuerte ciudadela, en su pensamiento es como una muralla elevada. (Proverbios 18, 11)

  • No maldigas al rey ni aun con tu pensamiento; no maldigas al rico ni aun en tu alcoba; porque las aves del cielo transportan la voz y un ser alado lo hace saber. (Eclesiastés 10, 20)

  • Porque somos hijos del azar, y tras esto seremos como si no hubiésemos sido. Porque humo es la respiración de nuestras narices, y el pensamiento una centella del latido de nuestro corazón. (Sabiduría 2, 2)


“Quanto maiores forem os dons, maior deve ser sua humildade, lembrando de que tudo lhe foi dado como empréstimo.” São Padre Pio de Pietrelcina