Trouvé 25 Résultats pour: Gritaron

  • En su angustia gritaron al Señor, y él los libró de sus apuros. (Salmos 107, 28)

  • Y Susana gritó fuertemente; pero también gritaron los dos viejos contra ella. (Daniel 13, 24)

  • Y gritaron: "¡Déjanos en paz, hijo de Dios! ¿Has venido aquí antes de tiempo para atormentarnos?". (Mateo 8, 29)

  • Dos ciegos, sentados junto al camino, oyeron que pasaba Jesús, y gritaron: "¡Señor, hijo de David, ten compasión de nosotros!". (Mateo 20, 30)

  • Él replicó: "Pues, ¿qué mal ha hecho?". Ellos gritaron más fuerte: "¡Que lo crucifiquen!". (Mateo 27, 23)

  • Ellos gritaron: "¡Crucifícalo!". (Marcos 15, 13)

  • Pero ellos gritaron: "¡Crucifícalo! ¡Crucifícalo!". (Lucas 23, 21)

  • Entonces gritaron nuevamente: "¡A ése no! ¡A Barrabás!". Barrabás era un bandido. (Juan 18, 40)

  • Los sumos sacerdotes y sus criados, al verlo, gritaron: "¡Crucifícalo! ¡Crucifícalo!". Pilato les dijo: "Tomadlo vosotros y crucificadlo, pues yo no encuentro culpa en él". (Juan 19, 6)

  • Ellos gritaron: "¡Fuera! ¡Fuera! ¡Crucifícalo!". Dijo Pilato: "¿Voy a crucificar a vuestro rey?". Los sumos sacerdotes respondieron: "No tenemos más rey que el césar". (Juan 19, 15)

  • Pero cuando se dieron cuenta de que era judío, todos a una gritaron por espacio de casi dos horas: "¡Grande es la Diana de los efesios!". (Hechos 19, 34)

  • Gritaron con voz potente: "¿Hasta cuándo, tú, el maestro, el santo, el veraz, vas a esperar a hacer justicia y a vengar nuestra sangre de los habitantes de la tierra?". (Apocalipsis 6, 10)


“Pobres e desafortunadas as almas que se envolvem no turbilhão de preocupações deste mundo. Quanto mais amam o mundo, mais suas paixões crescem, mais queimam de desejos, mais se tornam incapazes de atingir seus objetivos. E vêm, então, as inquietações, as impaciências e terríveis sofrimentos profundos, pois seus corações não palpitam com a caridade e o amor. Rezemos por essas almas desafortunadas e miseráveis, para que Jesus, em Sua infinita misericórdia, possa perdoá-las e conduzi-las a Ele.” São Padre Pio de Pietrelcina