Trouvé 231 Résultats pour: columnas del templo

  • y de un salto se puso en pie y andaba. Entró con ellos en el Templo andando, saltando y alabando a Dios. (Hechos 3, 8)

  • le reconocían, pues él era el que pedía limosma sentado junto a la puerta Hermosa del Templo. Y se quedaron llenos de estupor y asombro por lo que había sucedido. (Hechos 3, 10)

  • Estaban hablando al pueblo, cuando se les presentaron los sacerdotes, el jefe de la guardia del Templo y los saduceos, (Hechos 4, 1)

  • «Id, presentaos en el Templo y decid al pueblo todo lo referente a esta Vida.» (Hechos 5, 20)

  • Obedecieron, y al amanecer entraron en el Templo y se pusieron a enseñar. Llegó el Sumo Sacerdote con los suyos, convocaron el Sanedrín y todo el Senado de los hijos de Israel, y enviaron a buscarlos a la cárcel. (Hechos 5, 21)

  • Cuando oyeron esto, tanto el jefe de la guardia del Templo como los sumos sacerdotes se preguntaban perplejos qué podía significar aquello. (Hechos 5, 24)

  • Se presentó entonces uno que les dijo: «Mirad, los hombres que pusisteis en prisión están en el Templo y enseñan al pueblo.» (Hechos 5, 25)

  • Y no cesaban de enseñar y de anunciar la Buena Nueva de Cristo Jesús cada día en el Templo y por las casas. (Hechos 5, 42)

  • El sacerdote del templo de Zeus que hay a la entrada de la ciudad, trajo toros y guirnaldas delante de las puertas y a una con la gente se disponía a sacrificar. (Hechos 14, 13)

  • Y esto no solamente trae el peligro de que nuestra profesión caiga en descrédito, sino también de que el templo de la gran diosa Artemisa sea tenido en nada y venga a ser despojada de su grandeza aquella a quien adora toda el Asia y toda la tierra.» (Hechos 19, 27)

  • Cuando el magistrado logró calmar a la gente, dijo: «Efesios, ¿quién hay que no sepa que la ciudad de los efesios es la guardiana del templo de la gran Artemisa y de su estatua caída del cielo? (Hechos 19, 35)

  • Entonces Pablo tomó al día siguiente a los hombres, y habiéndose purificado con ellos, entró en el Templo para declarar el cumplimiento del plazo de los días de la purificación cuando se había de presentar la ofrenda por cada uno de ellos. (Hechos 21, 26)


“Como é belo esperar!” São Padre Pio de Pietrelcina