Trouvé 45 Résultats pour: Seguridad

  • de modo que los malévolos de ayer y hoy desciendan en un solo día al Hades por la violencia y nos permitan gozar, en los días futuros, de la perpetua paz y seguridad.» (Ester 13, 7)

  • Su confianza es un hilo solamente, su seguridad una tela de araña. (Job 8, 14)

  • Mientras viven en paz las tiendas de los salteadores, en plena seguridad los que irritan a Dios, los que meten a Dios en su puño! (Job 12, 6)

  • Le dejaba apoyarse con seguridad, pero sus ojos vigilaban sus caminos. (Job 24, 23)

  • ¿He hecho del oro mi confianza, o he dicho al oro fino: «Tú, mi seguridad»? (Job 31, 24)

  • Una parte del ejército real se desplegó por las alturas de los montes, mientras algunos lo hicieron por el llano; y avanzaban con seguridad y buen orden. (I Macabeos 6, 40)

  • Mientras ellos invocaban al Señor Todopoderoso para que guardara intactos, en completa seguridad, los bienes en depósito para quienes los habían confiado, (II Macabeos 3, 22)

  • Apolonio, hijo de Menesteo, fue enviado a Egipto para la boda del rey Filométor. Cuando supo Antíoco que aquél se había convertido en su adversario político se preocupó de su propia seguridad; por eso, pasando por Joppe, se presentó en Jerusalén. (II Macabeos 4, 21)

  • «El Señor Dios vela y con toda seguridad se apiadará de nosotros, como declaró Moisés en el cántico que atestigua claramente: "Se apiadará de sus siervos".» (II Macabeos 7, 6)

  • En cuanto a mí, me encuentro postrado sin fuerza en mi lecho, con un amistoso recuerdo de vosotros. A mi vuelta de las regiones de Persia, contraje una molesta enfermedad y he considerado necesario preocuparme de vuestra seguridad común. (II Macabeos 9, 21)

  • Armó a cada uno de ellos, no tanto con la seguridad de los escudos y las lanzas, como con la confianza de sus buenas palabras. Les refirió además un sueño digno de crédito, una especie de visión, que alegró a todos. (II Macabeos 15, 11)

  • El temor de Yahveh es seguridad inexpugnable; sus hijos tendrán en él refugio. (Proverbios 14, 26)


“Meu Deus, perdoa-me. Nunca Te ofereci nada na minha vida e, agora, por este pouco que estou sofrendo, em comparação a tudo o que Tu sofreste na Cruz, eu reclamo injustamente!” São Padre Pio de Pietrelcina