Trouvé 422 Résultats pour: Genealogía de los sacerdotes

  • Los sumos sacerdotes y los principales de los judíos le presentaron acusación contra Pablo e insistentemente (Hechos 25, 2)

  • Estando yo en Jerusalén presentaron contra él acusación los sumos sacerdotes y los ancianos de los judíos, pidiendo contra él sentencia condenatoria. (Hechos 25, 15)

  • Así lo hice en Jerusalén y, con poderes recibidos de los sumos sacerdotes, yo mismo encerré a muchos santos en las cárceles; y cuando se les condenaba a muerte, yo contribuía con mi voto. (Hechos 26, 10)

  • «En este empeño iba hacia Damasco con plenos poderes y comisión de los sumos sacerdotes; (Hechos 26, 12)

  • sin padre, ni madre, ni genealogía, sin comienzo de días, ni fin de vida, asemejado al Hijo de Dios, permanece sacerdote para siempre. (Hebreos 7, 3)

  • mas aquél, sin pertenecer a su genealogía, recibió el diezmo de Abraham, y bendijo al que tenía las promesas. (Hebreos 7, 6)

  • Y por cuanto no fue sin juramento - pues los otros fueron hechos sacerdotes sin juramento, (Hebreos 7, 20)

  • Además, aquellos sacerdotes fueron muchos, porque la muerte les impedía perdurar. (Hebreos 7, 23)

  • que no tiene necesidad de ofrecer sacrificios cada día, primero por sus pecados propios como aquellos Sumos Sacerdotes, luego por los del pueblo: y esto lo realizó de una vez para siempre, ofreciéndose a sí mismo. (Hebreos 7, 27)

  • Es que la Ley instituye Sumos Sacerdotes a hombres frágiles: pero la palabra del juramento, posterior a la Ley, hace el Hijo perfecto para siempre. (Hebreos 7, 28)

  • Preparadas así estas cosas, los sacerdotes entran siempre en la primera parte de la Tienda para desempeñar las funciones del culto. (Hebreos 9, 6)

  • y ha hecho de nosotros un Reino de Sacerdotes para su Dios y Padre, a él la gloria y el poder por los siglos de los siglos. Amén. (Apocalipsis 1, 6)


“Meu Deus, perdoa-me. Nunca Te ofereci nada na minha vida e, agora, por este pouco que estou sofrendo, em comparação a tudo o que Tu sofreste na Cruz, eu reclamo injustamente!” São Padre Pio de Pietrelcina