Trouvé 115 Résultats pour: fui
Él es tu gloria y tu Dios, y él realizó en tu favor esas tremendas hazañas de que fuiste testigo. (Deuteronomio 10, 21)
Recuerda que tú fuiste esclavo en Egipto y que el Señor, tu Dios, te rescató. Por eso ahora te doy esta orden. (Deuteronomio 15, 15)
Recuerda que fuiste esclavo en Egipto y observa fielmente estas prescripciones. (Deuteronomio 16, 12)
En cambio, no consideres abominable al edomita, porque es tu hermano, ni tampoco al egipcio, porque tú fuiste huésped en su país. (Deuteronomio 23, 8)
Recuerda que fuiste esclavo en Egipto y que el Señor, tu Dios, te rescató de allí. Por eso te ordeno obrar de esta manera. (Deuteronomio 24, 18)
Acuérdate siempre que fuiste esclavo en Egipto. Por eso te ordeno obrar de esta manera. (Deuteronomio 24, 22)
La gente de Efraím dijo a Gedeón: "¿Qué nos has hecho? ¿Por qué no nos llamaste cuando fuiste a combatir contra Madián?". Y se lo reprocharon violentamente. (Jueces 8, 1)
Los hombres de Efraím se reunieron, cruzaron el Jordán en dirección a Safón, y dijeron a Jefté: "¿Por qué fuiste a combatir contra los amonitas y no nos llamaste para que fuéramos contigo? Ahora vamos a prenderle fuego a tu casa contigo adentro". (Jueces 12, 1)
"Estamos de paso, le respondió él; venimos de Belén de Judá y vamos hasta los confines de la montaña de Efraím, porque yo soy de allí. Fui a Belén de Judá, y ahora estoy de regreso. Pero no hay nadie que me reciba en su casa, (Jueces 19, 18)
Estuve contigo dondequiera que fuiste y exterminé a todos tus enemigos delante de ti. Yo haré que tu nombre sea tan grande como el de los grandes de la tierra. (II Samuel 7, 9)
Pero los hombres de Israel replicaron a los de Judá: "Nosotros tenemos sobre el rey, incluso sobre David, diez veces más derechos que ustedes. ¿Por qué nos han relegado? ¿No fuimos nosotros los primeros en proponer que volviera nuestro rey?". A esto respondieron los hombres de Judá con palabras aún más duras. (II Samuel 19, 44)
Cuando informaron al rey Salomón: "Joab se ha refugiado en la Carpa del Señor y está al lado del altar", Salomón mandó decir a Joab: "¿Qué motivo tienes para refugiarte junto al altar?". Joab respondió: "Tuve miedo de ti y fui a refugiarme junto al Señor". Entonces Salomón envió a Benaías, hijo de Iehoiadá, con esta orden: "Ve y mátalo". (I Reyes 2, 29)