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Sujetarás las dos puntas de las cadenas de oro en las dos argollas que están en los extremos superiores del pectoral; (Exodo 28, 24)
se paró a la entrada del campamento y exclamó: "¡Los que están de parte del Señor, vengan aquí!". Todos los hijos de Leví se agruparon a su alrededor, (Exodo 32, 26)
Pero deberán tener por una cosa inmunda a cualquier animal que carezca de aletas y escamas, entre los seres que se mueven por las aguas y entre los vivientes que están en las aguas, ya sea en el mar o en los ríos. (Levítico 11, 10)
De esta manera, los israelitas dejarán de ofrecer sacrificios a los sátiros, detrás de los cuales se están prostituyendo. Este será para ellos un decreto válido para siempre, a lo largo de las generaciones. (Levítico 17, 7)
Pero no entrará detrás del velo ni se acercará al altar; él tiene un defecto corporal y no debe profanar esos lugares que me están consagrados, porque yo soy el Señor, que los santifico. (Levítico 21, 23)
En cuanto a las ciudades de los levitas, estos tendrán siempre derecho de rescate sobre las casas que están en las ciudades de su propiedad. (Levítico 25, 32)
Ninguno de los bienes que pertenecen a una persona -ya sea un hombre, un animal o un campo de su propiedad- podrá ser vendido o rescatado si ha sido consagrado al Señor por el exterminio total: todas esas cosas están exclusivamente consagradas al Señor. (Levítico 27, 28)
Porque ellos están dedicados a mí exclusivamente, entre todos los israelitas: yo los tomé para mí en lugar de todos los que abren el seno materno, o sea, de todos los primogénitos. (Números 8, 16)
¡Ahora nuestras gargantas están resecas! ¡Estamos privados de todo, y nuestros ojos no ven nada más que el maná!". (Números 11, 6)
¿De dónde voy a sacar carne para dar de comer a todos los que están llorando a mi lado y me dicen: ‘Danos carne para comer’? (Números 11, 13)
Un muchacho vino corriendo y comunicó la noticia a Moisés, con estas palabras: "Eldad y Medad están profetizando en el campamento". (Números 11, 27)
Pero, ¡qué poderosa es la gente que ocupa el país! Sus ciudades están fortificadas y son muy grandes. Además, vimos allí a los anaquitas. (Números 13, 28)
