Trouvé 1158 Résultats pour: ciudad santuario

  • Él es el ministro del Santuario y de la verdadera Morada, erigida no por un hombre, sino por el Señor. (Hebreos 8, 2)

  • La primera Alianza tenía un ritual para el culto y un santuario terrestre. (Hebreos 9, 1)

  • El Espíritu Santo da a entender con esto que el camino del Santuario no es accesible mientras subsista el primer recinto. (Hebreos 9, 8)

  • entró de una vez por todas en el Santuario, no por la sangre de chivos y terneros, sino por su propia sangre, obteniéndonos así una redención eterna. (Hebreos 9, 12)

  • Cristo, en efecto, no entró en un Santuario erigido por manos humanas -simple figura del auténtico Santuario- sino en el cielo, para presentarse delante de Dios en favor nuestro. (Hebreos 9, 24)

  • Y no entró para ofrecerse a sí mismo muchas veces, como lo hace el Sumo Sacerdote que penetra cada año en el Santuario con una sangre que no es la suya. (Hebreos 9, 25)

  • Por lo tanto, hermanos, tenemos plena seguridad de que podemos entrar en el Santuario por la sangre de Jesús, (Hebreos 10, 19)

  • Porque Abraham esperaba aquella ciudad de sólidos cimientos, cuyo arquitecto y constructor es Dios. (Hebreos 11, 10)

  • Pero aspiraban a una patria mejor, nada menos que la celestial. Por eso, Dios no se avergüenza de llamarse «su Dios» y, de hecho, les ha preparado una Ciudad. (Hebreos 11, 16)

  • Ustedes, en cambio, se han acercado a la montaña de Sión, a la Ciudad del Dios viviente, a la Jerusalén celestial, a una multitud de ángeles, a una fiesta solemne, (Hebreos 12, 22)

  • Por eso Jesús, para santificar al pueblo con su sangre, padeció fuera de las puertas de la ciudad. (Hebreos 13, 12)

  • Porque no tenemos aquí abajo una ciudad permanente, sino que buscamos la futura. (Hebreos 13, 14)


“Para consolar uma alma na sua dor, mostre todo o bem que ela ainda pode fazer”. São Padre Pio de Pietrelcina