Trouvé 68 Résultats pour: trata

  • No consultes jamás a una mujer sobre su rival; a un cobarde a propósito de la guerra; a un negociante sobre una tasa de interés; a un comprador si vendes algo; a un envidioso si se trata de un agradecimiento; a un flojo sobre algo que hay que hacer; a un jornalero por el fin de su trabajo; a un sirviente holgazán por un trabajo pesado. (Sirácides (Eclesiástico) 37, 11)

  • Lo mismo sucede con el alfarero que trabaja sentado frente al torno y hace andar la rueda con sus pies; está inmerso en su faena y trata de producir más. (Sirácides (Eclesiástico) 38, 29)

  • Hijo mío, trata de no vivir mendigando, ¡es mejor morir que mendigar! (Sirácides (Eclesiástico) 40, 28)

  • ¡Y ahora bendigan al Dios del Universo que hace en todas partes grandes cosas! Desde que nacemos nos hace vivir, y nos trata siempre con misericordia. (Sirácides (Eclesiástico) 50, 22)

  • En cuanto al sinvergüenza, sus inventos son perversos, pues trata de perjudicar a los pobres con sus mentiras, aunque sean justos los reclamos de estos humildes. (Isaías 32, 7)

  • ni lo crean cuando trata de que ustedes confíen en Yavé. Que no les diga a ustedes que Yavé los librará sin duda alguna y no permitirá que esta ciudad caiga en manos del rey de Asur. (Isaías 36, 15)

  • ¿Acaso te has olvidado de Yavé, que te creó, que extendió los cielos y que fundó la tierra? Pues te lo pasas siempre asustado al ver la rabia del tirano, que trata, por todos los medios, de destruirte. Pero, ¿dónde está ahora su rabia? (Isaías 51, 13)

  • Feliz el hombre que siempre se comporta así, sin desmayar, que se fija en no profanar el sábado y trata de no hacer algo malo. (Isaías 56, 2)

  • ¿Cómo debe ser el ayuno que me gusta, o el día en que el hombre se humilla? ¿Acaso se trata nada más que de doblar la cabeza como un junco o de acostarse sobre sacos y ceniza? ¿A eso llamas ayuno y día agradable a Yavé? (Isaías 58, 5)

  • Pero así como se trata a los higos malos, tan podridos que no se pueden comer, así trataré a Sedecías, rey de Judá, a sus príncipes y al resto de los habitantes de Jerusalén, tanto a los que quedaron en este país como a los que viven en Egipto. (Jeremías 24, 8)

  • Y aquellos jefes dijeron al rey: «Este hombre debe morir, porque sus discursos desalientan a los combatientes que quedan en esta ciudad y aun a todo el pueblo. Es evidente que este hombre no busca nuestro bien, sino que trata de perdernos.» (Jeremías 38, 4)

  • que su padre no cometió. Come la carne sin desangrar, ensucia a la mujer de su prójimo, trata violentamente al pobre y al indigente, roba, no devuelve la garantía que se le pasó, vuelve su mirada hacia los sucios ídolos y comete el crimen, (Ezequiel 18, 11)


“A natureza humana também quer a sua parte. Até Maria, Mãe de Jesus, que sabia que por meio de Sua morte a humanidade seria redimida, chorou e sofreu – e como sofreu!” São Padre Pio de Pietrelcina