Trouvé 273 Résultats pour: ovejas y vacas de Abraham

  • Jacob les dijo: «Veo que el sol está todavía alto y que aún no es hora para guardar el ganado, ¿por qué no dan agua a sus ovejas y las llevan a pastar.» (Génesis 29, 7)

  • Los pastores respondieron: «No podemos hacer eso hasta que no se junten todos los rebaños y se haya sacado la piedra de la boca del pozo. Entonces damos de beber a las ovejas.» (Génesis 29, 8)

  • Todavía estaba Jacob hablando con ellos, cuando llegó Raquel con las ovejas de su padre, pues era pastora. (Génesis 29, 9)

  • Apenas Jacob vio a Raquel, hija de Labán, hermano de su madre, se acercó al pozo, movió la piedra de la boca del pozo y dio agua a las ovejas de Labán. (Génesis 29, 10)

  • Entonces Jacob separaba los corderos. En una palabra, hacía que las ovejas del rebaño de Labán miraran todo lo que tenía rayas o era negro. Así se formó rebaños que le pertenecían y que apartaba de los de Labán. (Génesis 30, 40)

  • Cada vez que entraban en celo las ovejas más robustas, Jacob volvía a poner en las pilas y abrevaderos las varas, a la vista de las ovejas, para que se aparearan ante ellas. (Génesis 30, 41)

  • Pero si las ovejas eran débiles, no ponía las varas. Así las débiles quedaban para Labán, y las robustas eran para Jacob. (Génesis 30, 42)

  • Cuando él decía: "Las crías manchadas serán para ti", todas las ovejas parían corderitos manchados. Y si decía: "Las rayadas serán tu sueldo", todo el rebaño tenía corderitos rayados. (Génesis 31, 8)

  • Pues me ocurrió una vez, cuando era el tiempo en que entraban en celo las ovejas, que alcé los ojos y vi entre sueños que los machos que cubrían a las hembras eran rayados, manchados y de varios colores. (Génesis 31, 10)

  • En veinte años que llevo contigo, tus ovejas y tus cabras no han malparido, y nunca he comido ni un cordero de tus rebaños. (Génesis 31, 38)

  • Jacob se llenó de miedo y se desesperó. Dividió en dos campamentos a la gente que estaba con él, y lo mismo hizo con el ganado, las ovejas y los camellos, (Génesis 32, 8)

  • doscientas cabras y veinte machos cabríos, doscientas ovejas y veinte carneros, (Génesis 32, 15)


“Devo fazer somente a vontade de Deus e, se lhe agrado, o restante não conta.” São Padre Pio de Pietrelcina