12. Repleta tus graneros con tus generosidades, éstas te preservarán de la desgracia; combatirán por ti frente al enemigo, mejor que un sólido escudo o una pesada lanza.





“Quando a videira se separa da estaca que a sustenta, cai, e ao ficar na terra apodrece com todos os cachos que possui. Alerta, portanto, o demônio não dorme!” São Padre Pio de Pietrelcina