11. Aunque se haga el humilde y se acerque agachado, mantente en guardia y desconfía de él; actúa con él como el artesano que pule un espejo de bronce y que sabe que el óxido no se resistirá hasta el fin.





“Recorramos a Jesus e não às pessoas, pois só ele nunca nos faltará.” São Padre Pio de Pietrelcina