15. A la tercera vez Dalila le dijo: «Tú dices que me amas, pero tu corazón no está conmigo. Pues por tres veces te burlaste de mí y no me confiesas de dónde te viene tanta fuerza.»





“Para consolar uma alma na sua dor, mostre-lhe todo o bem que ela ainda pode fazer.” São Padre Pio de Pietrelcina