36. Pero el ángel del Señor lo tomó por la cabeza y llevándolo de los cabellos lo puso en Babilonia, junto al foso, con la rapidez de un espíritu.





“Seja grato e beije docemente a mão de Deus. É sempre a mão de um pai que pune porque lhe quer bem” São Padre Pio de Pietrelcina