4. Se postraron ante el dragón que había entregado el poderío a la bestia, y se postraron también ante la bestia, diciendo: «¿Quién hay como la bestia? ¿Quién puede competir con ella?»





“Tente percorrer com toda a simplicidade o caminho de Nosso Senhor e não se aflija inutilmente.” São Padre Pio de Pietrelcina