5. Es que David había seguido los rectos caminos de Yavé y no se había apartado en ningún momento de todo lo que Yavé le ordenó, excepto en el asunto de Urías, el heteo. Lo demás referente a Abías y todo lo que hizo está escrito en el libro de los Hechos de los reyes de Judá.





“Tenhamos sempre horror ao pecado mortal e nunca deixemos de caminhar na estrada da santa eternidade.” São Padre Pio de Pietrelcina