Juan, 7
32. Los fariseos oyeron lo que la gente decía de él y, de acuerdo con los sumos sacerdotes, mandaron guardias a prenderlo.
32. Los fariseos oyeron lo que la gente decía de él y, de acuerdo con los sumos sacerdotes, mandaron guardias a prenderlo.
“Subamos sem nos cansarmos, sob a celeste vista do Salvador. Distanciemo-nos das afeições terrenas. Despojemo-nos do homem velho e vistamo-nos do homem novo. Aspiremos à felicidade que nos está reservada.” São Padre Pio de Pietrelcina