Job, 6
12. ¿Es acaso mi fuerza la fuerza de la roca? ¿Es mi carne de bronce?
12. ¿Es acaso mi fuerza la fuerza de la roca? ¿Es mi carne de bronce?
“Não se desencoraje, pois, se na alma existe o contínuo esforço de melhorar, no final o Senhor a premia fazendo nela florir, de repente, todas as virtudes como num jardim florido.” São Padre Pio de Pietrelcina