21. No es eso, sino que un hombre de la montaña de Efraín, llamado Sebá, hijo de Bicrí, ha levantado su mano contra el rey David. Entregádmelo a él solo, y yo me alejaré de la ciudad". La mujer le dijo: "Mira, te tiraremos su cabeza por encima de la muralla".





“Cada Missa lhe obtém um grau mais alto de gloria no Céu!” São Padre Pio de Pietrelcina