15. El rey no dio oídos al pueblo, porque así lo había dispuesto el Señor, para que se cumpliera la palabra que el Señor había anunciado por medio de Ajías de Silo a Jeroboán, hijo de Nabat.





“Você teme um homem,um pobre instrumento nas mãos de Deus, mas não teme a justiça divina?” São Padre Pio de Pietrelcina