13. Tomó los ídolos familiares, los metió en la cama, puso en la cabecera una piel de cabra y los cubrió con un vestido.





“Sejam como pequenas abelhas espirituais, que levam para sua colméia apenas mel e cera. Que, por meio de sua conversa, sua casa seja repleta de docilidade, paz, concórdia, humildade e piedade!” São Padre Pio de Pietrelcina