Juan, 10
28. Yo les doy Vida eterna: ellas no perecerán jamás y nadie las arrebatará de mis manos.
28. Yo les doy Vida eterna: ellas no perecerán jamás y nadie las arrebatará de mis manos.
“Se precisamos ter paciência para suportar os defeitos dos outros, quanto mais ainda precisamos para tolerar nossos próprios defeitos!” São Padre Pio de Pietrelcina