44. El rey envió con él al sacerdote Sadoc, al profeta Natán, a Benaías, hijo de Iehoiadá, a los quereteos y a los peleteos, y ellos lo hicieron montar en la mula del rey.





“Tenhamos sempre horror ao pecado mortal e nunca deixemos de caminhar na estrada da santa eternidade.” São Padre Pio de Pietrelcina