25. El día quince del séptimo mes, con ocasión de la Fiesta, el príncipe hará lo mismo durante siete días: el mismo sacrificio por el pecado, el mismo holocausto, la misma oblación y el mismo aceite.





“Tenhamos sempre horror ao pecado mortal e nunca deixemos de caminhar na estrada da santa eternidade.” São Padre Pio de Pietrelcina