Löydetty 428 Tulokset: viaje en el desierto

  • Vosotros volveos y partid hacia el desierto, camino del mar Rojo. (Deuteronomio 1, 40)

  • "De allí partimos por el desierto camino del mar Rojo, como el Señor me lo había ordenado. Durante largo tiempo estuvimos dando vueltas en torno a la montaña de Seír. (Deuteronomio 2, 1)

  • El Señor, tu Dios, te ha bendecido en todas tus empresas. Él ha velado tu peregrinación a través de este vasto desierto. Cuarenta años hace ya que te acompaña el Señor, tu Dios, sin que te falte nada. (Deuteronomio 2, 7)

  • Pasamos, pues, al lado de nuestros hermanos, los hijos de Esaú, que viven en Seír, camino de la Arabá, de Elat y de Asiongaber. Luego, dando la vuelta, tomamos el camino del desierto de Moab. (Deuteronomio 2, 8)

  • "Desde Cades Barne al torrente Zared, vuestro viaje duró treinta y ocho años, lo suficiente para que desapareciera de en medio del campamento toda la generación en edad de guerra, tal como el Señor lo había jurado. (Deuteronomio 2, 14)

  • Desde el desierto de Quedemot envié mensajeros a Sijón, rey de Jesbón, para hacerle estas proposiciones de paz: (Deuteronomio 2, 26)

  • para los rubenitas, Beser, en el desierto, en la meseta; para los gaditas, Ramot, en Galaad; y para los manasitas, Golán, en Basán. (Deuteronomio 4, 43)

  • Incúlcaselas a tus hijos y repíteselas cuando estés en casa, lo mismo que cuando estés de viaje, acostado o levantado. (Deuteronomio 6, 7)

  • Acuérdate del camino que el Señor te ha hecho andar durante cuarenta años a través del desierto con el fin de humillarte, probarte y conocer los sentimientos de tu corazón y ver si guardabas o no sus mandamientos. (Deuteronomio 8, 2)

  • que te ha conducido a través de vasto y horrible desierto, de serpientes venenosas, de escorpiones, tierra de sed y sin agua; que hizo brotar para ti agua de la roca más dura (Deuteronomio 8, 15)

  • y te ha alimentado en el desierto con el maná, desconocido para tus mayores, con el fin de humillarte y probarte para prepararte un futuro dichoso. (Deuteronomio 8, 16)

  • Acuérdate no lo olvides: tú irritaste al Señor, tu Dios, en el desierto; desde el día en que saliste de Egipto hasta el día de vuestra entrada en este lugar habéis sido rebeldes al Señor. (Deuteronomio 9, 7)


“Não desperdice suas energias em coisas que geram preocupação, perturbação e ansiedade. Uma coisa somente é necessária: elevar o espírito e amar a Deus.” São Padre Pio de Pietrelcina