Löydetty 126 Tulokset: quedará
y el que lo transporte deberá lavar sus vestiduras y quedará impuro hasta la tarde. Tendréis por impuros estos animales. (Levítico 11, 28)
También quedará impura cualquier cosa sobre la que caiga el cadáver de estos animales, ya sea un objeto de madera, un vestido, una piel o un saco, es decir, una cosa que sirva para algo: deberá ser lavado con agua y quedará impuro hasta la tarde; entonces será puro. (Levítico 11, 32)
Si alguno de estos animales cae muerto dentro de una vasija de barro, lo que hay en ella quedará impuro y la vasija deberá romperse. (Levítico 11, 33)
Cualquier alimento preparado con el agua que había dentro quedará impuro; igualmente toda bebida tomada en tales recipientes quedará impura. (Levítico 11, 34)
Cualquier objeto sobre el que caigan los cadáveres de estos animales quedará impuro; horno y hornillo serán destruidos, porque son impuros, y como tales deben ser tratados. (Levítico 11, 35)
Si se muere uno de los animales que os sirven de alimento, quien toque el cadáver quedará impuro hasta la tarde; (Levítico 11, 39)
quien coma la carne, lavará sus vestidos y quedará impuro hasta la tarde. (Levítico 11, 40)
El sacerdote los ofrecerá ante el Señor, hará sobre ella el rito de absolución y quedará purificada de su flujo de sangre. Ésta es la ley para la mujer que da a luz un niño o una niña. (Levítico 12, 7)
Si sus posibilidades no llegan a un cordero, presentará dos tórtolas o dos pichones, uno como holocausto y otro en sacrificio por el pecado. El sacerdote hará sobre ella el rito de absolución y quedará purificada". (Levítico 12, 8)
Al séptimo día lo volverá a examinar; si ve que la llaga ha perdido brillo y no se ha extendido por la piel, el sacerdote lo declarará puro: se trata de una pústula. Lavará sus vestidos y quedará puro. (Levítico 13, 6)
Pero si después de lavado, la mancha ha desaparecido del vestido, será lavado otra vez y quedará puro. (Levítico 13, 58)
y ofrecerá sobre el altar el holocausto y la ofrenda. El sacerdote hará sobre él el rito de absolución y quedará puro. (Levítico 14, 20)