Löydetty 248 Tulokset: monte Nebo

  • vendrán muchos pueblos y dirán: Venid, subamos al monte del Señor, a la casa del Dios de Jacob, para que nos enseñe sus caminos y caminemos por sus sendas. Pues de Sión saldrá la ley y de Jerusalén la palabra del Señor. (Isaías 2, 3)

  • entonces el Señor formará, sobre toda la extensión del monte de Sión y sobre sus asambleas, una nube de humo durante el día y un resplandor de fuego llameante por la noche. Pues encima de todo la gloria del Señor será tienda (Isaías 4, 5)

  • Ved: yo y los hijos que el Señor me ha dado señales somos y presagios en Israel de parte del Señor omnipotente, que mora en el monte Sión. (Isaías 8, 18)

  • Cuando el Señor haya concluido toda su obra en el monte Sión y en Jerusalén, castigará la altivez del corazón del rey de Asiria y la arrogancia de sus ojos altaneros. (Isaías 10, 12)

  • Hoy mismo estará en Nob; alzará ya su mano contra el monte de la hija de Sión, contra la colina de Jerusalén. (Isaías 10, 32)

  • No harán ya mal, ni causarán más daño en todo mi monte santo, porque el país estará lleno del conocimiento del Señor, como las aguas llenan el mar. (Isaías 11, 9)

  • Izad una enseña sobre un monte pelado, lanzad gritos hacia ellos, indicad con la mano que entren por las puertas de los nobles. (Isaías 13, 2)

  • Te decías en tu corazón: El cielo escalaré, encima de las estrellas de Dios levantaré mi trono; en el monte de la asamblea me sentaré, en lo último del norte. (Isaías 14, 13)

  • Ha subido la gente de Dibón a las alturas a llorar; sobre el Nebo y Madaba gime Moab. Toda cabeza, calva; toda barba, cortada; (Isaías 15, 2)

  • Enviad el cordero al soberano de la tierra; desde Sela, a través del desierto, al monte de la hija de Sión. (Isaías 16, 1)

  • Entonces presentará ofrendas al Señor omnipotente el pueblo espigado y bronceado, el pueblo temido desde siempre, la gente robusta y dominante, cuya tierra está surcada de ríos, en el lugar donde reside el nombre del Señor omnipotente, el monte Sión. (Isaías 18, 7)

  • La luna enrojecerá, se avergonzará el sol; porque el Señor omnipotente reinará en el monte Sión, en Jerusalén, y ante sus ancianos brillará su gloria. (Isaías 24, 23)


Como distinguir uma tentação de um pecado e como estar certo de que não se pecou? – perguntou um penitente. Padre Pio sorriu e respondeu: “Como se distingue um burro de um homem? O burro tem de ser conduzido; o homem conduz a si mesmo!” São Padre Pio de Pietrelcina