Löydetty 355 Tulokset: judíos

  • Ester respondió: "Si al rey le parece bien, que se conceda también mañana a los judíos ejecutar el decreto en Susa, como lo han hecho hoy, y que se cuelgue en la horca a los diez hijos de Amán". (Ester 9, 13)

  • Los judíos de Susa se reunieron también el catorce del mes de adar y mataron otros trescientos hombres, pero sin saquear sus bienes. (Ester 9, 15)

  • Los demás judíos que habitaban el reino también se reunieron para defenderse y deshacerse de sus enemigos, matando setenta y cinco mil enemigos, pero sin saquear sus bienes. (Ester 9, 16)

  • Los judíos de Susa se habían reunido el trece y el catorce, descansando el quince, que fue para ellos día de banquete y alegría. (Ester 9, 18)

  • Por eso los judíos de las provincias celebran el catorce del mes de adar como día de banquete y alegría, y se intercambian regalos. (Ester 9, 19)

  • Mardoqueo escribió estos sucesos y envió cartas a todos los judíos de las provincias de Asuero, a las próximas y a las lejanas. (Ester 9, 20)

  • como días en que los judíos se deshicieron de sus enemigos, y mes en que la tristeza se convirtió en alegría y el luto en regocijo. Estos dos días debían convertirse en días de banquete y alegría, haciéndose regalos unos a otros y dando donativos a los pobres. (Ester 9, 22)

  • Los judíos aceptaron celebrar anualmente las fiestas que espontáneamente habían comenzado a observar, tal como les había escrito Mardoqueo: (Ester 9, 23)

  • "Amán, hijo de Hamdatá, el de Agag, enemigo de todos los judíos, había proyectado su destrucción echando pur, es decir, "suerte", para destruirlos y acabar con ellos. (Ester 9, 24)

  • Pero cuando Ester fue al rey, el rey ordenó por escrito que el proyecto malvado de Amán contra los judíos se llevara a cabo en él. Amán y sus hijos fueron colgados en la horca. (Ester 9, 25)

  • Ésta es la razón de llamar a estos días purim, de pur". Así pues, basados en esta carta y en lo que ellos mismos habían visto y comprobado, los judíos (Ester 9, 26)

  • Conmemorados y celebrados de generación en generación en todas las familias, provincias y ciudades, estos días de purim no serán olvidados por los judíos, ni su recuerdo desaparecerá de su descendencia. (Ester 9, 28)


“O amor tudo esquece, tudo perdoa, sem reservas.” São Padre Pio de Pietrelcina