Löydetty 548 Tulokset: elección de la mejor parte

  • José puso esta ley, todavía en vigor hoy en Egipto: dar al Faraón la quinta parte; sólo las tierras de los sacerdotes no pasarán a ser propiedad del Faraón. (Génesis 47, 26)

  • Al ver los hermanos de José que su padre había muerto, se decían: "A lo mejor ahora José nos aborrece y se cobra todo el mal que le hicimos". (Génesis 50, 15)

  • ¿No te decíamos en Egipto: No te preocupes de nosotros, pues queremos servir a los egipcios? Porque ¿no es, acaso, mejor servir a los egipcios que morir en el desierto?". (Exodo 14, 12)

  • Si uno deja pastar su ganado en el campo o en la viña de otro, resarcirá el daño con lo mejor de su campo o de su viña. (Exodo 22, 4)

  • Cada una de las tres parejas de brazos tendrá un cáliz en su parte inferior; los seis exactamente igual. (Exodo 25, 35)

  • Las unirás en dos conjuntos, el primero de cinco y el segundo de seis, de modo que la sexta cubra la parte anterior de la tienda. (Exodo 26, 9)

  • Como las cortinas de la tienda son más largas, la mitad de la cortina sobrante colgará en la parte posterior del tabernáculo. (Exodo 26, 12)

  • Aarón y sus hijos las mantendrán encendidas de la noche a la mañana delante del Señor, en la tienda de la reunión, en la parte de acá del velo que está delante del testimonio: ley perpetua para los israelitas en todas sus generaciones". (Exodo 27, 21)

  • Fijarás las dos puntas de los cordones a los dos engarces del pectoral y las engancharás a las hombreras del efod en su parte delantera. (Exodo 28, 25)

  • Harás otros dos anillos de oro, que fijarás a las dos hombreras del efod en su parte inferior delantera, a ras de la juntura, por encima del cinturón del efod. (Exodo 28, 27)

  • La sujetarás con un cordón de púrpura violeta, de modo que caiga sobre la tiara en su parte anterior. (Exodo 28, 37)

  • Tomas parte de la sangre del becerro, y con el dedo untarás con ella los cuernos del altar, derramando la restante al pie del altar. (Exodo 29, 12)


“Amemos ao próximo. Custa tão pouco querer bem ao outro.” São Padre Pio de Pietrelcina